
Pero, según un estudio de la Fundación Automovilística británica “RAC”, no es así. La investigación dio a conocer que conducir y enviar SMS de los celulares es mucho más peligroso que manejar bajo el efecto del alcohol.
Según la pesquisa del RAC el enviar SMS mientras se maneja disminuye del 35% el desempeño al volante, frente a un 18% para los que ingieren bebidas alcohólicas. En el Reino Unido, así como en otros países, se ha prohibido el uso del celular -ya sea para hablar o enviar mensajes- mientras se conduce.
Pero, aunque es ilegal, el 48% de los conductores entre 18 y 24 años envian mensajes SMS mientras conducen.
Se sabe que al enviar un texto por el teléfono móvil, el conductor pierde concentración y atención y por consecuencia una reducción del control del vehículo. En algunos países europeos causar un accidente grave por distraerse mientras se está manejando -como leer un mensaje de texto, ver un mapa, comer o maquillarse- puede ser sancionado con hasta cinco años de reclusión.
Sin embargo, en muchos otros países ésta sigue siendo una actividad permitida legalmente.
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