Al menos 1.000 pingüinos han llegado a las costas de Brasil y pese a que muchos murieron en el camino, se estima que han llegado a recorrer más de 6 mil kilómetros, informó la cadena de noticias británica BBC en su página web. A comienzos de año, comenzaron a surgir las primeras informaciones sobre pingüinos que llegaban a las costas de los estados del sur de Brasil como Río de Janeiro. Pero ahora se han descubierto hasta en el extremo norte del país.
Algunos expertos explicaron que la migración de pingüinos está muy ligada a la necesidad de encontrar comida y el hecho que recorran tanta distancia indicaría que algo ha ocurrido en el suministro de peces. Sin embargo, no saben con seguridad si esto se debe a cambios en la temperatura del agua y las corrientes marinas o si tiene que ver con la polución creada por el hombre.
Algunas de las aves fueron encontradas cubiertas de petróleo mientras que existen pruebas de que otras comieron peces que no forman parte de su dieta habitual.
De vuelta a casa
La Marina brasileña envió este martes un barco a la Antártida para devolver a 31 pingüinos que habían arribado a las aguas tropicales de Río de Janeiro.
Días atrás, la fuerza aérea brasileña también habilitó un avión Hércules, donde cientos de pasajeros palmípedos viajaron desde el sur del país vecino hasta los fríos mares de la Patagonia.
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