La llamada de auxilio de una familia dominicana terminó en tragedia cuando presuntamente seis policías golpearon brutalmente a un hombre emocionalmente perturbado en Brooklyn.
“Me siento muy mal porque llamamos a la ambulancia para que nos ayudara y entonces llegó la policía y en vez de ayudar nos fue peor”, afirmó ayer Ruth De Los Santos, madre de Gamalier Reyes, de 27 años, quien se encuentra internado en el hospital Woodhull Hospital, donde está siendo evaluado siquiátricamente y tratado por tener huesos faciales rotos.
De acuerdo a la denuncia de la familia, el pasado 11 de abril, después de llegar desde Santo Domingo en la República Dominicana, Indhira Reyes llamó al trabajador social que supervisa el caso del hermano, que sufre de trastorno bipolar y esquizofrenia. y le pidió ayuda porque el hermano estaba “trastornado” y necesitaba ser trasladado a un hospital.
El trabajador social, Emanuel Simon, llamó al 911 para que enviaran una ambulancia.
“Pero en vez de llegar los del servicio de emergencia, llegaron ocho agentes poniéndose guantes; vinieron listos como para tratar a un animal”, dijo Zully De La Cruz, hermana mayor de Reyes, refiriéndose a los agente que llegaron al apartamento.
Según la querella, los agentes aislaron a los familiares fuera del apartamento, mientras que adentro golpeaban a Reyes y cuando lo sacaron para ponerlo en la ambulancia no permitieron que ningún familiar lo acompañara.
La policía desmintió la versión de la familia diciendo que Reyes vino golpeado desde la República Dominicana e hicieron pública la llamada al 911 hecha por el trabajador social.
“Acaban de regresar de la República Dominicana. Tuvieron que regresar antes de lo previsto porque él (Reyes) estuvo involucrado en una pelea; él (Reyes) estaba muy agresivo allá; se metió en una pelea allá, y le golpearon la cabeza y acaban de regresar”, dice Simon al operador del 911, después de dar los detalles del incidente en el apartamento donde habita la familia dominicana en Brooklyn.
“¡Es una mentira! Todos saben que si una persona perturbada mentalmente es herida en la cabeza como dice la policía no le permitirían viajar a Nueva York”, respondió De La Cruz, quien añadió que tiene testigos que vieron la condición del hermano cuando entró a los Estados Unidos.
“El hecho que los agentes golpearan a una persona enferma mentalmente es injusto, cruel e innecesario”, dijo Desiree Camacho, hermana menor de la víctima, quien exigió que se castigue a los agentes que golpearon al hermano y que la ciudad establezca normas para tratar mejor a personas con problemas mentales.
POR GLORIA MEDINA
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